Nunca viene mal una ayuda extra: un dispositivo que nos ayude a ponerlos los calcetines si no podemos agacharnos, un abridor de tarros de cocina para “casos difíciles” o una faja lumbar que nos proporcione una postura correcta. Sin olvidarnos de las medias de compresión, zapatos para diabéticos o pies delicados. Y un largo etcétera.
Tampoco nos olvidamos de las personas que tienen un enfermo a su cargo. Una cama articulada con elevación, una grúa, ayudas para el baño, etc harán su vida más fácil y sus esfuerzos serán menores. Los asesores de ORTECMO le ayudarán a dar solución a su problema.
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